miércoles, 8 de mayo de 2013

Principio de incertidumbre

Principio de incertidumbre, de David Matías (Editora Regional de Extremadura, 2013)


PRINCIPIO DE INCERTIDUMBRE
Francisco Rodríguez Criado
Teniendo en cuenta los malos tiempos para la lírica en que vivimos, no deja de ser una buena noticia que la Editora Regional de Extremadura insista en el que ha sido siempre uno de sus principales objetivos: publicar la obra de nuevos autores extremeños. Es el caso de Principio de incertidumbre, de David Matías (Galisteo, 1986). Aun siendo este el primer libro de Matías, el lector no encontrará en él torpezas o ingenuidades narrativas por culpa de la improvisación. Muy al contrario, Matías, licenciado en Filología Hispánica, renuncia al facilismo con el que a veces los nuevos autores se lanzan al ruedo y apuesta por un texto que abarca o parece abarcar sus inquietudes intelectuales: el añejo legado cultural del antiguo régimen en un pequeño pueblo de provincias, la asimetría de intereses entre padres e hijos, la imposibilidad de conocer lo real, el arte, la filosofía o el estudio de las fuerzas que regulan el Universo.
Principio de incertidumbre no es una novela al uso, con presentación, nudo y desenlace, sino más bien un periplo vital y filosófico del personaje-narrador, un escritor en ciernes de escasa capacidad de adaptación al medio que está siempre en conflicto con las personas que condicionan su circunstancia.
En un ejercicio cuasi metaliterario, la novela es, a la vez que un texto de creación, una declaración de intenciones sobre el oficio de escribir, donde debería primar el deseo artístico y no el afán de reconocimiento.
Principio de incertidumbre –como apunta el personaje-narrador– no es una novela de entretenimiento sino de observación de este mundo inasible que nos tocado en suerte.

Artículo publicado en El Periódico Extremadura el miércoles, 8 de mayo, de 2013.